Un reciente informe del Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones (OEDA) revela que el consumo de bebidas energéticas entre adolescentes está asociado a peores resultados académicos, mayor absentismo escolar y un mayor riesgo de consumir sustancias psicoactivas. Este estudio, realizado en el marco del nuevo ‘ESTUDES’, muestra que cerca del 50% de los jóvenes en España consumen estos productos, siendo más frecuente en las regiones del norte y este del país.

Además, un estudio interno realizado por nuestra entidad durante el curso 2022-23 nos dice que el 21,7% de la juventud encuestada consume bebidas energéticas a diario, con una edad media de inicio de 11,81 años. Sin ignorar que el consumo de las bebidas energéticas junto la mezcla del consumo de alcohol, tabaco y otras sustancias, puede generar riesgos en la salud, como la hipertensión y la pérdida de masa ósea.

La publicidad intensiva y la percepción de estas bebidas como una fuente de energía y rendimiento físico son algunos de los factores que contribuyen a su consumo entre los jóvenes. Sin embargo, es crucial educar y concienciar a la población adolescente sobre los riesgos asociados a su consumo excesivo y promover un estilo de vida saludable y equilibrado.

En el Proyecto de Prevención 2.0 de nuestra asociación queremos visibilizar, advertir y trabajar de manera colaborativa entre instituciones, educadores, familias y la comunidad en general para prevenir el uso problemático de estas sustancias y proteger la salud y el bienestar de nuestra juventud.